
Quizá sea todo un efímero sueño en el cual somos protagonistas y antagonistas a la vez; quizá sea nuestra conciencia inquieta la que nos guía en el supuesto camino de luz, pero ¿existe la luz?, y si existe, ¿qué es la luz?: la ruta que demarca el sendero del bien y del mal, lo que se ve al final del túnel, lo que ilumina nuestra vida para seguir soportando esta ilusión dolorosa llamada comúnmente vida, lo que ven los agonizantes cuando están tendidos en su lecho mortuorio para guiar a su torcida, gastada y cansada conciencia a la paz eterna...
¿Qué es Ser polvo en el Viento?: ¿dejarse llevar por las emociones, vivir la vida hermosa con todas sus facetas, dejarse llevar por la libido antes que por la razón?.
Sin embargo, ser polvo en el viento puede ser exquisito cuando se observa la inmensidad de lo que nos rodea, sea verdadero y concreto o ilusión falsa; por que la magnificencia de las cosas - o ilusiones -, está allí, palpitando, gritándo para que la observen y contemplen, para darle al hombre(nótese que se habla de la humanidad en sí), un descanso en este tiempo tan ajetreado y consumidor de energía espiritual, mental y física.
Pero, aún así me queda dando vueltas en la cabeza la pregunta: ¿qué soy sino polvo en el Viento?.-
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